El director Carlitos Giménez capta lo popular y festivo del texto en escenas de gran dinamismo y comicidad medida.
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En esta obra la muerte viene acompañada de dos banderilleros (...) no debemos menospreciar el tango, que conmovió a los asistentes, tal vez por el problema que actualmente viven nuestros hermanos de la Argentina.
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La lluvia no impidió que este espectáculo hiciera su debut en San Cristóbal, al contrario, la gente respondió al llamado.
Fuente: Ana Lía Cassina. Archivo: Carmen Gallardo
