"...el inocultable sello escénico gimeniano en cuanto a las coordenadas de forma y contenido, en los cuales el juego de los elementos involucrados sirven de preciso cemento para configurar una unidad escénica contundente y pródiga en sugerencias (...). Francis Rueda fue determinante para este espectáculo. Su caracterización de Emma fue impecable (...) Karl Hoffmann cumplió con inteligente respuesta histriónica (...) daremos crédito a la participación de Ángel Fernández Mateu por su incisiva composición y su penetrante dominio de la escena".
Fuente: Ángel Fernández Mateu