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| ©Rolando Peña-Karla Gómez |
¿En qué FITC trabajaste y cuál fue tu tarea?
Desde
1973, realización del I FITC, hasta 2002 fui el Jefe
de Tramoya de diversos teatros de Caracas y Director Técnico.
¿Qué
importancia personal tuvo para ti el FITC?
Para
mí fue uno de mis más grandes retos, me ayudó a crecer como técnico, resolviendo
cada necesidad presente en las diferente salas, sea en espacios cerrados o al
aire libre en Caracas y en diversas
ciudades de todo el país, en las que me correspondía trabajar, en la
realización y/o montaje de escenografías.
¿Qué
importancia cultural y económica crees que tuvo el FITC para Venezuela?
En Venezuela en la década de los 70-80 el teatro era muy
básico y al presentarse este proyecto sin fines de lucro, avalado por el
ministerio de la cultura, la Alcaldía de Caracas y la empresa privada,
contribuyó no solo en la reestructuración de los diferentes teatros de
Venezuela, también permitió el alcance de la cultura teatral a todos los
niveles sociales, y que los grupos de
teatro se interesaran más en formarse, investigar, crecer y hacerse
conocer más allá de sus fronteras, llegando a ser muy importante para ellos
participar en el FITC.
¿Crees que el FITC benefició o perjudicó a los grupos de teatro nacionales?
Por supuesto que los benefició, ya que en el FITC contaban
con talleres de formación, foros que conocían y reconocían las diferentes
compañías de teatro a nivel mundial y se permitía el reconocimiento de su
propia compañía de teatro.
El FITC, además de acondicionar teatros y permitirnos acceder a ver obras y participar en talleres dictados por maestros y maestras de la escena mundial, ¿crees que sirvió para algo más? ¿O que el dinero que se usó para financiarlo se podría a ver usado en necesidades más urgentes?
El acondicionamiento de los teatros de Venezuela y la participación de las diferentes compañías a nivel nacional (compañías estas donde participan personas de diferentes estratos sociales) permitió el alcance a diferentes comunidades y demostró que el teatro no solo pertenece a una ELITE, pues se encuentra al alcance de todos. El uso de estos recursos fue una inversión a la cultura social, al rescate de valores y principios.
¿Crees que el público venezolano se volvió más exigente con las obras nacionales a partir del FITC?
Sí,
y no solo el público, el mismo teatro también se exigía más a sí mismo.
¿Qué
significa María Teresa Castillo para el FITC?
María
Teresa Castillo fue un pilar fundamental en el FITC, creyó y apoyó a Carlos Giménez
con su proyecto y juntos navegaron en esa gran nave.
¿Qué significó Carlos Giménez?
“El
padre de la criatura” y director del grupo Rajatabla.
ESMEIRO
“BOBURE” HERRERA
Fue Jefe de Tramoya en el
Ateneo de Caracas, Director Técnico del Teatro Teresa Carreño de Caracas y Director
Técnico de diferentes ediciones del FITC en ciudades del interior de Venezuela: Valencia, Barquisimeto,
Maracaibo, entre otras.
Inició sus actividades en
el grupo Rajatabla de Carlos Giménez como realizador de escenografía y técnico.
Participó en el Festival de Teatro de Oriente, el Festival Nacional Juvenil de
Teatro y Danza, Festival de Teatro Clásico, Festival Iberoamericano de Cádiz
(España), Festival Internacional de las Artes, Festival de Jóvenes Coreógrafos,
Gala Latinoamericana de Danza, entre otros festivales.
Es Maestro Honorario de Unearte y recibió el Premio Municipal de Teatro en tres ocasiones.
