La estética del poder envilecido, por Rubén Monasterios, El Nacional, Caracas, 30 de marzo de 1993



"Carlos Giménez trató al poder político de tal forma, que nos lo hizo sentir como un fenómeno al mismo tiempo repulsivo y fascinante, como una de las parcelas del dominio de lo demoníaco... (...)  una carrera que conduce a Carlos, en lo personal, a ser considerado uno de los directores pivotales del teatro experimental mundial... ".









Fuente: Ana Lía Cassina, Mariana Llanos, Carmen Gallardo